El presidente de Pfizer, Albert Bourla, citado en el comunicado, resaltó que “todos, independiente de la condición financiera, etnia, religión o geografía, merecen acceso a las vacunas contra el COVID-19 que salvan vidas”.
Y el presidente y cofundador de BioNTech, Ugur Sahin, destacó el “aumento continuo de la capacidad de fabricación”, lo que ha permitido entregar 1,300 millones de dosis, con una meta de 3,000 millones hasta finales de este año”, y la “alianza de hoy es un paso importante para ampliar el acceso a las vacunas en Latinoamérica”.
Para Maurizio Billi, presidente de Eurofarma, el acuerdo “representa un marco” en los 50 años de trayectoria que cumple la compañía brasileña y destacó la “capacidad industrial, tecnológica y de control de calidad” ofrecida para “contribuir al abastecimiento del mercado latinoamericano”.
La vacuna de Pfizer-BioNTech es utilizada en 120 países y en Brasil fue la primera en obtener el registro definitivo por parte de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa, regulador), condición otorgada en febrero y que apenas este mes consiguió en su propio país de origen, Estados Unidos.