El mismo equipo de científicos piensa que de haber estas civilizaciones extraterrestres, esas señales ya las hubieran detectado, y si la enviaron de vuelta la recibiríamos a finales de década.
«Estas naves espaciales se han comunicado con las antenas de radio de la Red de Estaciones Profundas (DSN) para descargar datos científicos y datos de telemetría. Las transmisiones hacia el exterior desde la DSN viajan con la nave espacial y se encuentran más allá al espacio interestelar. Estas transmisiones han encontrado y encontrarán otras estrellas, arrojándonos la posibilidad de que la vida inteligente en otros sistemas solares se encuentre con nuestras transmisiones terrestres», dice un resumen del estudio.
«Las señales de la DSN también son increíblemente débiles a distancias tan grandes, por lo que no está claro que otras estrellas detecten las transmisiones», sostiene el estudio.
Por otra parte, Jean-Luc Margot, un radioastrónomo de la Universidad de California, señala que «es poco probable que nuestras transmisiones produzcan una detección de la humanidad por parte de extraterrestres», según recoge el estudio.