El telescopio espacial James Webb (JWST, por sus siglas en inglés) no solo podría ayudar a desentrañar el origen del universo, sino que también otro misterio del espacio: la posible existencia de civilizaciones avanzadas en otros planetas mediante la contaminación atmosférica.
Según astrónomos estadounidenses, las capacidades que tiene el JWST para registrar indicadores de habitabilidad, analizar los niveles atmosféricos y superficiales en otros planetas, podrían ser útiles para detectar rastros de vida extraterrestre.
La tesis fue planteada por investigadores del Instituto de Ciencias del Espacio Blue Marble de Seattle, en un estudio publicado en la revista Earth and Planetary Astrophysics y que proponer buscar formas de vida avanzadas a través de la polución en atmósferas de los exoplanetas.
Los científicos proponen determinar la habitabilidad de un planeta mediante la detección de clorofluorocarbonos (CFC), un producto químico derivado del hidrocarburo que era usado como refrigerante y agente de limpieza y que es el responsable del agujero de la capa de ozono.
Según los investigadores, citados por el periódico británico Daily Mail, si el telescopio James Webb detecta moléculas de CFC en otros planetas, esto podría ser indicador de que están siendo producidos por una civilización que cuenta con una rápida industrialización.