Así, el límite estará marcado por Android 2.3.7, versión que fue presentada en 2011. La compañía tecnológica lo considera un sistema demasiado antiguo para hacer funcionar sus servicios.
Por ahora no se han comunicado las razones detrás de esta decisión, aunque se supone que están relacionados con el tema de la seguridad.
De acuerdo con los datos de distribución de Android, hoy día el porcentaje de versiones inferiores a Android 4.0 es menos de 0.2 por ciento. De cualquier manera, existen más de 3,000 millones de dispositivos Android.
Si bien es un porcentaje pequeño, aún puede existir una cantidad importante de teléfonos antiguos.
Así, la mayoría de estas personas deberá renovar su dispositivo con el sistema operativo móvil de la compañía, o bien resignarse y no acceder a las aplicaciones más tradicionales de Google, por lo menos las que piden el inicio de sesión.