Twitter ha estado luchando por mantener su base publicitaria desde que Musk se hizo cargo de la plataforma a fines del año pasado. Las empresas han reducido sus gastos tras la decisión de Twitter de restaurar las cuentas suspendidas y publicar una verificación de cuenta paga que dio lugar a que los estafadores se hicieran pasar por empresas.
Los planes de Meta llegan en un momento en que su plataforma más grande, Facebook, lucha por atraer la atención de una audiencia más joven, mientras que sus enormes inversiones en el metaverso, un mundo virtual donde los usuarios interactúan y trabajan, muestran pocas señales de dar sus frutos, al menos en el corto plazo.
Su aplicación para compartir videos, Instagram, también enfrenta una dura competencia a medida que los creadores de contenido o los influyentes exitosos abandonan la plataforma por TikTok.
No quedó claro de inmediato cuándo Meta lanzaría la nueva aplicación.