Según el balance, Rusia es el cuarto país con más muertos por COVID-19 del mundo, después de Estados Unidos, Brasil e India
El recuento del gobierno, basado en una definición muy restrictiva de los decesos, es de 24.031 fallecidos a causa de la pandemia en septiembre. En total, según esa fuente, 236.220 personas murieron a causa del coronavirus en Rusia desde que empezó la pandemia.
Desde fines de verano, Rusia no deja de batir récords de fallecidos y de contagios diarios, en tanto tan solo un tercio de la población está completamente vacunada, en un contexto de desconfianza hacia los inmunizantes producidos a nivel nacional.
El jueves, las autoridades cerraron, por once días, los servicios “no esenciales” en Moscú (restaurante, centros de ocio, salvo los de alimentación), para intentar frenar el avance de la epidemia.
A escala nacional, el presidente Vladimir Putin, que sigue rechazando imponer un confinamiento estricto, para no socavar la recuperación económica, decretó una semana no laborable del 30 de octubre al 7 de noviembre.