El primero vendría a dar más profundidad al centro del campo del Bayern. El croata era un fijo en sus alineaciones en Stamford Bridge y sería un buen complemento para Gorezka, Kimmich, Musiala y compañía.
Por su parte, el guardameta senegalés elevaría la competencia en la portería, donde no se sabe cómo y cuándo podrá reaparecer Manuel Neuer tras su lesión. De momento, Sommer no está teniendo el rendimiento esperado y es por ello que Tuchel preferiría tener otro portero de garantías como Mendy.
Por último, la última petición del alemán sería la de Federico Chiesa. El delantero italiano es muy querido en la Juventus, pero los problemas derivados del caso plusvalías y la posibilidad de no jugar en Europa el próximo curso podrían abrirle las puertas de salida.