El objeto también fue seguido por la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa. Según su reporte, el satélite que originó la bola de fuego ingresó a la atmósfera terrestre a una velocidad de unos 27,000 kilómetros por hora y había sido puesto en órbita en enero de 2021.
El aparato tenía un peso de 260 kilogramos y formaba parte de la red de internet satelital de Starlink, proyecto de la compañía que busca proporcionar conexión a las zonas más aisladas del planeta.
En estos momentos, la compañía de Elon Musk cuenta con más de 1,800 satélites orbitando que han sido lanzados por SpaceX.
De hecho, se estima que este domingo fueron tres los satélites que se desintegraron. Sin embargo, por ahora se desconoce el destino de los otros dos aparatos.